Y Dios la quiso mujer..

 

Se acabaron las conjeturas. Finalmente la ecografía de hace un par de semanas nos indicó que el bebe que crece en mi panza es una pequeña Niña. Mi instinto falló y el de muchas personas también. Mi padre no se equivocó, aunque creo que en su caso se trataba de un deseo más que de una adivinanza.

Debemos reconocer que la noticia nos pilló de sorpresa, pero luego del shock inicial, las sonrisas rápidamente aparecieron, especialmente en Roberto que se emocionó con la idea de tener una nena entre sus brazos, que seguramente le robará el corazón.

De porotín, pasó a ser porotina.....eso es lo único cierto hasta ahora, pues todavía no le encontramos un nombre adecuado.

Cuando mis amigos y familiares supieron la sorpresa, las reacciones fueron de todo tipo, pero las frases que más llamaron mi atención son las siguientes: ¡¡¡¡Que bien, ella siempre te acompañará en todo¡¡¡¡¡¡; huy que pena.........vendrá a sufrir como todas las mujeres.
Lo más importante es que ella está bien....y bastante bien diría yo, ya que se mueve todo el día, especialmente cuando me dispongo a descansar.